Por nuestro bienestar, invirtamos en salud mental

octubre 10, 2020



Este año hemos sido testigos de la importancia que tiene invertir en sanidad, pero dentro de este ámbito siempre hay la gran olvidada: La salud mental. 

Hoy 10 de octubre, día mundial de la salud mental y tras lo vivido este año (resultado de la infrafinanciación crónica del sistema de salud) pretende movilizarnos para invitarnos a invertir en ella. Con el lema de la Federación española de salud mental "Salud mental y bienestar, una prioridad global". 

Imagen de la Federación salud mental España - Diseño de Antonio Lorente



Desde 1948 la OMS define la salud como "un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades", pero la realidad es que, en el año 2020 la salud mental sigue entendiéndose como un mundo aparte.

A muchos de nosotros el confinamiento nos ha afectado a nivel psicológico y emocional, ya sea por qué no hemos tolerado bien la incertidumbre, porqué nos ha creado miedo y ansiedad, porque nos ha invadido la tristeza al estar lejos de nuestros seres queridos, porqué no hemos podido despedirnos de seres queridos, porqué nos ha afectado al sueño, porqué hemos aumentado el consumo de tabaco, alcohol u otras drogas, etc. Y todos aquellos que conozcáis a personas con problemas de salud mental sabréis que a la mayoría tampoco le ha hecho ningún bien. Pero no tan sólo el confinamiento ha provocado problemas de salud mental.


Algunos datos alarmantes 

  • La depresión y la ansiedad son una de las primeras causas de enfermedad, discapacidad e incapacidad laboral. Esta incapacidad tiene un costo económico mundial de 1 billón de dólares cada año.
  • Según la OMS 1 de cada 4 personas se verá afectada por un problema de salud mental a lo largo de su vida. Y 1 de cada 5 adolescentes tiene un trastorno mental. 
  • Cada 40 segundos una persona se suicida en el mundo. El suicidio es la segunda causa de mortalidad entre jóvenes de 15 a 29 años.
  • Las personas con trastorno mental grave pueden ver disminuida su esperanza de vida entre 10 y 20 años
  • Según la Agencia Europea por la seguridad y la Salud en el trabajo (OSHA) el 51% de los trabajadores sufren estrés. 
  • El 61% de las personas con un diagnóstico en salud mental se encuentra en situación de desempleo. Muchas personas pierden el empleo o la oportunidad de optar a él, por el mero hecho de tener un diagnóstico.
  • El 67% de las personas con un diagnóstico lo oculta debido a la discriminación y la estigmatización Por lo que estas personas además de su problema de salud, ven cómo su entorno social y laboral se ve afectado. 

Siendo problemas tan comunes y que nos pueden afectar a todos ¿Qué asistencia hay?

  • De promedio, los países gastan menos del 2% de sus presupuestos sanitarios en salud mental.
  • Pese a que en los últimos años la asistencia para el desarrollo destinada a la salud mental se ha incrementado, nunca ha superado el 1% de la asistencia para el desarrollo asignada a la salud.
  • En España la ratio es de 6 profesionales en salud mental por cada 100.000 habitantes, muy inferior a la media europea de 18 por cada 100.000 habitantes. La escasez de profesionales en este ámbito lleva a un colapso del servicio.
  • Este hecho impide que se puedan seguir terapias psicológicas validadas científicamente como se debería, ya que en algunos casos se requiere una frecuencia y un tiempo del que los profesionales de salud mental no disponen. Por tanto, es difícil que la sanidad pública pueda dar servicios de calidad. 
  • Eso mismo, complica la prevención por la dificultad de acceso al sistema. Cuando numerosos estudios demuestran que una atención temprana incluso en enfermedades graves como la esquizofrenia, aumenta enormemente la probabilidad de recuperación. 
  • Así mismo, hay una elevada tendencia al uso de psicofármacos por encima de la terapia psicológica, cuando en la mayoría de los casos, el tratamiento adecuado es una combinación de ambos, o exclusivamente la terapia psicológica. 
  • El primer punto de discriminación parte de nuestro sistema de salud, puesto que los centros de salud mental están apartados de el resto de departamentos de salud, marcando ya aquí una diferencia entre unos problemas de salud y otros


Pero no todo es tan negro como parece

Imagen de www.actualidad24.net



Según datos de la OMS:
  • Por cada dólar invertido en tratamientos contra la depresión y la ansiedad (los trastornos más frecuentes) se obtiene un retorno de 5 dólares
  • Por cada dólar invertido en tratamientos contra la drogodependencia se obtiene un retorno de hasta 7$
  • Se pueden incluir psicólogos generales sanitarios en atención primaria para evaluar y tratar afecciones de salud mental, reduciendo el colapso que tienen los centros de salud mental y atendiendo de forma preventiva a las personas que lo demanden.
  • La calidad de vida de las personas con trastornos del espectro autista o demencias puede mejorar si se forma adecuadamente a los cuidadores.
  • Mediante políticas de salud mental y la puesta en marcha de servicios comunitarios asequibles y de calidad se pueden proteger y promover los derechos de las personas con problemas de salud mental
  • Por cada euro invertido en programas de promoción de la salud en el trabajo se devuelve en más de 2,2 millones de euros. 


¿Qué puedo hacer yo?


La mayoría de la población concebimos los trastornos de salud mental como algo que no nos va a tocar a nosotros, algo ajeno, problema de otro. Pero después nos sentimos infelices,  comemos por ansiedad, tomamos una copa para evadirnos, no conseguimos pegar ojo por la noche, tenemos dolores musculares por estrés, dolores de cabeza o de estómago de los nervios, etc... Todo ello no quiere decir que tengas un trastorno de salud mental, pero sí que deberías de cuidarla.

  • Lo primero que puedes hacer a nivel individual para invertir en salud mental es tomar medidas si sientes que algo no está bien en ti. Darle la misma importancia a un dolor emocional (o incluso más) que a un dolor físico. Pide ayuda si es necesario. 
  • Apoya a tus familiares y amigos si ves que pueden necesitar ayuda en este sentido. 
  • Como ciudadano o compañero no discrimines, no temas, pregunta si desconoces, incluye, y recuerda que puedes ser tú en otro momento la persona afectada por un problema de salud mental. 
  • Como empresario puedes contratar personas con problemas de salud mental, son tan válidos cómo otro cualquiera, sus problemas de salud no tienen porqué interferir en su capacidad para trabajar. 
Y no puede faltar para acabar este artículo la conocida frase: "Mente sana, en cuerpo sano"





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