¿Cómo van a cambiar las relaciones sociales por el coronavirus?

mayo 24, 2020


Nunca antes habíamos necesitado tanto un abrazo como ahora, y nunca antes había sido un gesto tan peligroso.

Parque nacional y natural de Doñana, Andalucía


¿Habrá valido la pena este tiempo lejos de mi gente? ¿Cuanto tiempo más va a pasar sin poderles abrazar? ¿Y si soy asintomática y por mi culpa enferman mis seres queridos? ¿Entrarle a un desconocido en un bar, ya ha pasado a la historia? ¿Cuándo voy a poder quedar con mi cita Tinder? Y de tener sexo, ya ni hablamos, ¿no?

Es evidente que estamos todos a la expectativa de qué va a pasar con la desescalada. Y ¿qué es lo que todos ansiamos con el cambio de fases? El momento de reunirnos con los nuestros, de tocarlos, de abrazarlos, de sentirlos cerca, de mirarles a los ojos y decirles lo mucho que les hemos echado de menos, de darnos aquel beso apasionado y también ¿cómo no? de pasar una noche de sexo desenfrenado. 

Pero hay una idea que revolotea por nuestras cabezas una y otra vez y se interpone ante todo ese deseo ¿Y si pongo en riesgo su salud?

Si es así, entonces este artículo te interesa.

Ser humano, ser social


El ser humano es un ser social por naturaleza, necesita del grupo para su propia supervivencia. La pertenencia a un grupo nos ayuda a racionalizar el mundo en el que vivimos, nos genera aprobación y censura. Además, el grupo nos aporta seguridad, sentirnos unidos y en compañía nos ayuda a reducir la ansiedad y el miedo ante la incertidumbre. Y precisamente, la incertidumbre es un sentimiento que nos ha invadido a todos durante esta pandemia.

¿Cómo van a cambiar las relaciones?

Está claro que es muy difícil anticipar la respuesta social ante este hecho histórico, pero vamos a intentar resumir algunas teorías sociales que pueden ayudar a explicar el comportamiento de la sociedad, para después daros estrategias para afrontar esta situación.

Lo que dice la psicología social

Cuando afrontamos una circunstancia como esta podemos responder de dos formas:

1. Rendirnos: centrarnos en todo lo negativo y esperar a que todo pase.

2. Afrontar la amenaza: creando una mayor conexión con el resto y reformulando nuestros valores. 

Por lo que hemos podido observar en nuestra sociedad, hay una gran mayoría que ha optado por la segunda opción. Pero ¿Porqué?

Fernando Diz / CC BY-SA (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0)
Lince ibérico, Parque nacional y natural de Doñana.
Fotografia de: Fernando Diz / CC BY-SA (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0)

Experiencia compartida y trauma colectivo

Los motivos que explican porqué nos sentimos pertenecientes a un grupo son:

  • Biología compartida: la familia 
  • Experiencia compartida: la experiencia de confinamiento, la distancia social, las videollamadas, los aplausos hacia los sanitarios, el humor y los retos en las redes.
  • Trauma colectivo: la cantidad de contagios y muertes, el colapso del sistema sanitario. 

El actor devoto 

Para mantenernos sanos y a salvo, hemos tenido que sacrificar nuestra libertad, vida social y economía, poniendo por delante el bienestar del grupo. Para explicar porqué las personas están dispuestas a hacer sacrificios por su grupo tenemos la teoría psicosocial basada en el concepto del actor devoto. Teoría desarrollada por el profesor del departamento de Psicología Social y de las Organizaciones de la UNED Ángel Gómez.

Según el profesor, el actor devoto es aquel que puede hacer sacrificios costosos y extremos en defensa de los valores sagrados, cuando su identidad personal se fusiona con la identidad colectiva del grupo. Esta teoría se basa en tres componentes que se han visto afectados por la pandemia: la identidad personal, la identidad social y los valores.

Esta experiencia compartida y el trauma que hemos vivido nos ha llevado a modificar nuestra identidad social, es decir a replantearnos nuestra forma de relacionarnos con el grupo. 

Así mismo, con el coronavirus nuestra lista de prioridades ha cambiado rápidamente, hemos puesto nuestra salud y seguridad por delante de otras cosas también importantes para el ser humano. También ha afectado a nuestra forma de pensar y percibir los acontecimientos que nos rodean. Además del compromiso social que se ha adquirido, las personas también están reforzando valores como la solidaridad, la humanidad y la cooperación. Es decir, hemos puesto a examen nuestra identidad personal y nuestros valores. 

Caballos, Parque nacional y natural de Doñana
Fotografía de: Carlos F. Ingala Gomez

Y ahora bien ¿Estos sentimientos se perpetuaran?


Pues bien, hay dos tipos de teorías:

  • Las que defienden que estos cambios en la sociedad se mantendrán en el tiempo. Donde los valores como el altruismo y la solidaridad serán más fuertes. Y priorizaremos la sanidad y la educación frente al materialismo.
  • Y aquellas que defienden que las diferencias socioeconómicas exacerbadas por esta crisis van a crear más desigualdades y discriminación entre los grupos. 
Lo que es evidente es que esto ha marcado un antes y un después en nuestras vidas, así que esperemos que los cambios que vengan sean para crear un mundo mejor. No olvidemos rápidamente qué es lo verdaderamente importante. Esperemos que salgamos a las calles con nuestros sanitarios cuando reclamen unas condiciones dignas de trabajo, que apostemos por el comercio local y dejemos de enriquecer a las multinacionales, que cuando tengamos a los nuestros delante no dejemos que el móvil interfiera en nuestras relaciones, que no nos olvidemos de nuestros abuelos y que sigamos echando una mano a los que más lo necesitan

Vale, ahora ya sabemos que dice la teoría, pero ¿qué hacemos?

7 estrategias para las relaciones sociales

Basándonos en algunos estudios que relacionan la inteligencia emocional con una respuesta adaptativa al miedo os propongo las siguientes estrategias para las relaciones sociales en pandemia:
  1. Respetemos las normas de confinamiento y usemos mascarilla: No podemos controlar lo que los demás hacen, pero si podemos tener control sobre las medidas que nosotros tomamos. Pensad que las medidas son algo temporal, y aunque no sepamos cuando, volveremos a relacionarnos con normalidad. 
  2. Aprende a abrazar con palabras: Expresemos nuestras emociones verbalmente.  
  3. Si decides acercarte a un ser querido: valora si se trata de una persona de riesgo y maximiza tus medidas de higiene
  4. Respeta al resto: continuemos con la solidaridad que hemos iniciado en nuestras casas. 
  5. Mantén unos hábitos de vida saludables: Tener orden en nuestras vidas y cuidarnos ayuda a mejorar el sistema inmunitario.
  6. Queda con tu cita Tinder: conócela, pero siempre manteniendo la distancia de seguridad y las medidas de higiene
  7. Disfruta del sexo contigo mismo o busca otras maneras de divertirte con tu cita.
En definitiva, busquemos estrategias de afrontamiento que nos permitan manejar directamente el problema,  o bien, encontrar oportunidades para mejorar el desarrollo de nuestras relaciones y el aprendizaje de esta circunstancia. 

Si todos somos responsables con nuestras relaciones ahora, antes podremos volver a la normalidad.

¡Venga chic@s! Que ya casi todos estamos en fase 1!

Cualquier duda no dudéis en escribir en los comentarios.

"El abrazo es la forma silenciosa de decir: me importas"

Un abrazo!








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1 comentarios

  1. Muy buenas ideas: comercio local, apartar el móvil, solidaridad...

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